«Me han enviado estas palabras de la pequeña Paola (Italia), de 8 años.
– Paola, ¿por qué no quieres nunca mandarle un besito a la Virgen María que está arriba de tu cama, en el cuadro?
– ¡Porque no es la verdadera Virgen María! Le mando el beso a través de la ventana, hacia el Cielo. ¡Así llega enseguida a la verdadera Virgen María!»